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La casa en Sanlúcar que costó un dineral por ser árabe copia de la Alhambra


En 1896, con la intención de estar más cerca del Infante D. Antonio de Orleáns, Carmen Giménez, “residente accidental en esta población y habitualmente en París, donde tiene su domicilio, sin profesión, de estado soltera y de edad 24 años. Según se hace constar en un pasaporte del cónsul de España en dicha capital ...” compra la casa número 17 de la calle Cristóbal Colón de Sanlúcar de Barrameda. La venta se hace por 7.500 pesetas y en ella interviene directamente como compradora. Esta propiedad sería la primera que adquirirá en Sanlúcar y aunque la calle aparece nominada como Cristóbal Colón, anterior y popularmente recibía el nombre de Muleros, y de ella, también se sabe que se compró con dinero del Infante, y sin embargo nunca se hizo reclamación sobre ella en los pleitos posteriores.

En junio de 1897 comprará otra casa situada en la conocida Plaza del Cabildo y que lindaba por su parte trasera con la otra de su propiedad adquirida el año de antes. La venta se hace por un importe de 12.500 ptas, equivalentes a 50.000 reales de vellón y aunque se hace a favor de Dª Carmen Jiménez, natural de Cabra (Córdoba), mayor de edad y residente en París en la Rue de la Faisanderie nº 25, quien comparece en el acto notarial es D. Agustín Daspe y Gil, empleado particular y quien interviene con un poder notarial que a este efecto expidió el Consulado General de España en Francia de París.


Reedificada por deseo y a instancias de la propia Carmen Giménez, fue el propio infante don Antonio quien sufragó totalmente su construcción que ascendió a 225.000 pesetas, como así lo reconoció posteriormente cuando en su conocido pleito por la disputa de sus bienes familiares (PLEITO DEL INFANTE DON ANTONIO DE ORLEANS “- Nunciatura de Madrid, Legajo 713. Expediente 1 (fols. del 14 al 39), 1919. Archivio Segreto Vaticano. Roma) señala que entregó:

“El dinero para hacer su casa en Sanlúcar de Barrameda que costó un dineral por ser árabe copia de la Alhambra .......... 225.000”.

Esta casa de estilo árabe estaba en consonancia con el gusto ecléptico de la época de rememoración de estilos antiguos y se convirtió en la vivienda oficial de Carmen Giménez en la ciudad gaditana. De dos plantas y azotea, su fachada se decoraba con arcos de herradura sobre columnas nazaríes y cancelas de hierro con celosías arabescas, combinando el ladrillo visto y la yesería. Se localizaba en el centro de la ciudad, en la plaza del Cabildo, a pocos metros de la Calzada, zona de recreo y de acceso a la playa, y del Palacio de los duques de Montpensier. Vendida a la muerte de Carmen Giménez a un armador de Bajo de Guía, fue conocida popularmente como la “casa de chocolate” y a pesar de su peculiar estilo y de haber sido escenario de amores irresistibles y de rumores calientes, en palabras de Narciso Climent, fue demolida a finales de los años cincuenta del siglo XX.